Descubriendo Zaragoza I

A veces en la vida ocurren cosas que no llegamos a entender o que solo podemos entenderlas mas tarde. He pasado años sin querer nombrar, ni escuchar ni saber nada de un lugar aloque le había cogido una especie de manía (aunque en mi caso era mas que justificable)aun así,  hace poco decidí coger al toro por los cuernos, como se suele decir, y aventurarme a  un enfrentamiento con el pasado para convertirlo en un nuevo recuerdo.

y así fue que mis pasos y mi valentía nos llevó a Zaragoza, aquí hice un pequeño resumen de lo que fue la visita; mi vision de Zaragoza.
 Y entrando ya más en materia hay algo que los que me seguís en Instagram ya habréis visto y por los que algunos me habéis preguntado, así que esta entrada es para vosotros; os dará un poquito mas de info desde mi punto de vista del lugar.

El alojamiento en si se llama 26labrador , se trata de un hotelero rural con mucho encanto emplazado en medio de la NADA, con lo cual es perfecto para desconectar, de todo y de todos. Su punto especial lo ponen sus dueños, Juan y Alicia que son una pareja realmente maravillosa totalmente entregados a tu hotel y al cuidado de sus clientes.
La particularidad del hotel es que está totalmente ambientando en el comic (sobretodo francés ymás  concretamente  el belga Tintin) y la bande dessinée , a mi personalmente no me resultó mucho mas que una anécdota, muy bien traida ya que me resulto super practica para darle una sorpresa a J por su cumpleaños.
 A parte de la temática del hotel yo personalmente me enamore del lugar por completo y  de todo el terreno que rodea el hotel y en particular del melocotonero que había en flor, al que creo que le hice una sesión de fotos en toda regla. 

El Congost de Mont-rebei (segunda parte)

Dicen que a la tercera va la vencida y en mi caso concreto, así fue.
A principios del mes de Junio he tenido la oportunidad, por fin, de volver a mi querido Congost de Mont-rebei, desde que lo descubrí hace años en aquella revista: una revista, google maps y empieza la aventura y mas tarde,  lo visité  y se ha convertido casi en una especie de obsesión, (lo de mis lugares favoritos se queda corto)
En esta ocasión hubo un poco menos de improvisación y por tanto algo mas de preparación.
Incluso pudimos pasar la noche allí…. cerca, ya que dentro del mismo Congost esta prohibido hacerlo, bajo peligro de denuncia, según nos informaron.
Siendo así merece la pena despertarse, cuanto mas cerca mejor, para poder afrontar, cualquiera de las rutas que te frece este maravilloso lugar, lo más despejado posible.

Una vez iniciada la ruta, podemos escoger itinerario en función de nuestras preferencias, también a la entrada te dan un tríptico muy útil para la visita. 

Uno de los puntos de interés de la ruta, el puente colgante… antes de que preguntéis, SI, es obligatorio cruzarlo, no hay otro modo de acceder al congost, de ser así yo misma hubiera tomado esa ruta. 

Segundo puente colgante de la ruta, no por ello impone menos respeto que el primero.

Uno de los puntos mas interesantes y famosos o de la ruta, la escalera encaramada en la pared, esta al final de la ruta, al otro lado del puente de la foto anterior,  en el que dimos por finalizada la nuestra. 

Lo mejor para finalizar una ruta es un buen túper de macarrones a la boloñesa, para reponer fuerzas. 

El fin de la ruta te suele dejar unas botas, bien embarradas que junto con las agujetas suelen ser señales del trabajo realizado., en este caso muy satisfactorio. 

Una revista, google maps, y empieza la aventura; El Congost de Mont-rebei ( Primera parte)

La primera vez que oí hablar de este lugar, fue en la sección de viajes de una revista de moda, no me lo acababa de creer, ya que la mayoría de los lugares paradisiacos que aparecen en esos reportajes suelen estar a bastante distancia y son bastante inaccesibles, tanto por tiempo como por economía,
Así que mire el mapa y nuevamente; no me lo podía creer.
Para situarnos, el congost (desfiladero) de mont-rebei, se localiza entre las provincias de Huesca y Lleida, entre las comarcas de la Ribagorza y el Pallars Jussà; es espacio natural ( como no)  y tiene una extensión de 600 hectáreas. 
El río que lo atraviesa,  el Ribera Ribagozana, es la frontera natural entre las comunidades autónomas de Cataluña y Aragón. 
He tenido la oportunidad de ir unas cuantas veces, con lo cual es mas que evidente que esta en mi lista de lugares favoritos ( en realidad creo que fue el lugar que inauguró esa lista).
He podido verlo en diferentes épocas del año, la primera vez a principios de abril, la segunda a finales de agosto y esta ultima a principios de Junio; En todas las épocas el paisaje conserva su encanto natural, aunque hay que decir que si se evitan las temperaturas extremas mejor que mejor. 

lo primero y lo más impresionante, al menos a mi, es el color del agua. Recuerdo perfectamente  que la gente preguntaba al ver las fotos si había modificado el color con photoshop, la respuesta es no. 

Lo siguiente mas impresionante (al menos para mi) es el puente colgante que si o si hay que atravesar, porque si no lo haces te lo pierdes todo. Y seria una pena. 
Vale la pena no esperar a la vuelta y girar la cabeza de vez en cuando para disfrutar de las vistas.

la ruta transcurre por un camino excavado en la pared, muy muy fácil de hacer.


Nadie me habló de Es Grau

He decidido y no podía ser menos, empezar  mi visión personal de  Menorca por un pueblito que me enamoro, a pesar de no constar en  la planificación inicial y casi en ninguna guía, di con él por casualidad. Está claro que tenia que ser y además se ha ganado un puesto en mi lista personal de lugares favoritos.
Evidentemente es una opinión personal y la percepción también, pero después de todo ¿no son eso las fotos, la percepción personal de las cosas?
Cuando se habla de Mernorca, siempre se piensa en playas paradisiacas, que las hay, en calas maravillosas, en ensaimadas….
Todo el mundo te describe la zona sur, de irremediable visita e indiscutible belleza, pero como me ha dado por decir….
Nadie me habló de ES GRAU:                            
Un pequeño paraíso al norte de la isla. situado en pleno parque natural de S’ albufera des Grau, fue declarado en 1995 reserva natural de la biosfera, era antiguo lugar popular de vacaciones de la isla, ahora lo recomiendan a los que viajen con niños por la poca profundidad de sus playas.


Descubrir pueblecitos como es Grau , me dejan cada vez mas claro que me encantan los pueblos de pescadores…

formado enteramente por casitas encaladas incluso los tejados son de un blanco (muy familiar a mi vista) aun así, o quizás por eso, precioso.  

pequeños detalles son los que te muestran el encanto del lugar. 

No se como lo hago, debo decir que mi sorpresa se debe a que precisamente, » no lo hago», últimamente casi todos mis viajes me acaban llevando a parar a un parque natural. La cuestión es que siempre acabo visitando parajes protegidos y que son maravillosos.
nunca pensé que dirigirse al norte seria algo tan emocionante y soleado; mediados de mayo, 11.30 de la mañana 25,5 grados.

Como digo; en los viajes tiene tanta cabida la planificación como la improvisación, bendita improvisación que aquel día me descubrió una foto en internet y me llevó a este rincón de Menorca del que…. Nadie me habló, que sigue sin destacar en las guías de viaje, que encontré por casualidad y del cual yo pienso hablarle a todo el mundo, porque me dejó totalmente enamorada.

Al-Mudawwar al-Adna, el castillo.

Hace apenas una semana, en otra entrada (El otro día aprendi una palabra ), 
os presentaba el castillo de Almodovar del río; uno de los pueblos que ocupa una posición importantísima en mi lista de lugares imperdibles. 
Hoy vamos acercarnos un poquito mas a él, vamos a encaramarnos a esa loma redonda  (Almodóvar viene del árabe  «Al-mudawar» que quiere decir » el redondo»,  haciendo referencia al promontorio sobre el que se eleva el castillo) y  a acercarnos hasta tocar sus paredes e incluso a entrar dentro, para adorar sus vistas, que no son para nada, en absoluto despreciables. 
Vista general del pueblo y el castillo al fondo, con algunos valientes disfrutando de unas vistas más que privilegiadas. 
A medida que vamos ascendiendo se puede apreciar la verdadera magnitud del castillo. 
Vista del Guadalquivir y una pequeña apreciación de las linea de AVE.

El vestidor del rey.
Vistas de la campiña a través de las magnificas ventanas del castillo. 

Los calabozos…… 
El castillo, como tal, esta repleto de recovecos oscuros, de subidas y bajadas; quien sabe la de historias que  callan sus muros.
Detalle de una fuente. 

Nos vamos ya, abandonamos el castillo no sin hacer hincapié en su suelo, que debo decir que al igual que sus piedras y paredes, han claro hondo en mi , marcando una huella muy, muy personal, que llevo conmigo desde bien chiquitita. 


Topofília

El otro día aprendi una palabra:
Topofilia: pasión por la tierra, concretamente por algún lugar mágico y adorado en su superficie, viene del griego » amor al lugar».

Todos tenemos un lugar del que guardamos recuerdos especiales, mágicos y maravillosos, de esos que te hacen reír y llorar a la vez, ya sea porque allí se criaron nuestros padres y en consecuencia hemos pasado allí muchos veranos, o porque en unas vacaciones de visita,  algo del lugar en cuestión nos robo el corazón.
En esta ocasión mi motivo es el primero; y no me puedo creer que después de todo este tiempo no le haya dedicado un post a dicho lugar, lo resumiremos alegando que lo bueno se hace esperar…., y lo solucionaremos enseguida.
El pueblo en concreto se llama Almodovar del río, se encuentra en la provincia de Córdoba, en pleno camino de dicha capital andaluza a la propia capital de Andalucía, Sevilla.
 De echo las vías del AVE, se dejan caer por allí y desde el propio tren se puede observar lo más característico que tiene este pueblo; su castillo.
Situado en lo alto de un cerro y visible desde varios kilómetros,  el castillo de la Floresta otorga a Almodovar del río una silueta muy característica que una vez se introduce en tu retina, se clava en tu mente siendo muy difícil de olvidar. Y más, claro esta, si se trata de uno de esos lugares imperdibles que cada cual va encontrando a lo largo de su vida, alrededor de este bonito mundo que habitamos. 

el mostruo del lago y la puesta de sol

Cuenta la leyenda…

Al igual que otros lagos como el Ness, el de Bañolas cuenta con una leyenda popular según la cual, fueron primero las tropas de Carlomagno quienes, aprovechando su estancia en la ciudad de Gerona, se acercaron a Bañolas para intentar reducir y matar al dragón. Y que fue el Emperador, embargado de ardor guerrero, quien tuvo que pedir ayuda a San Emeterio, un monje francés que llegó a tierras gerundenses con él para combatir a los moros. 
Cuando la bestia salió de su refugio se quedó mirando a aquel hombrecillo que no paraba de rezar y, como si de un cachorrillo se tratara, le siguió hasta la plaza. 
Después de este suceso, el santo milagrero fundó el monasterio de San Esteban de Bañolas, antes de irse a vivir a una cueva en medio de un espeso bosque donde no era posible adivinar si era de día o de noche. El monstruo regresó al lago, donde dicen que aún vive. 
A partir de ahí,  allá cada uno con su imaginación, esta claro que nos gustan las leyendas y que en ocasiones hasta creer que son ciertas. 
Yo solo sé, que durante nuestra estancia, mientras fotografiábamos la puesta de sol, había unas sombras muy sospechosas en el agua que bien podrían dar mucho, pero que mucho juego a la imaginación de algunos… (ahí lo dejo…. ). 

Morella, un pueblo con mucho encanto.

 Morella   es un municipio del   País Valenciano   que se encuentra en la comarca de los  Puertos  , de la que es la capital. Presidida por el robusto  castillo fortaleza de origen musulmán situado a 1073 metros sobre el nivel del mar y el casco a sus pies.

Aun a riesgo de parecer insensible o incluso frivola al respecto a mi personalmente lo que mas me llamó la atención de esta sala, con toda la información que había dentro es que se hubieran habilitado redes como cortinas.
La calles y tiendas de Morella están llenas de Pequeños detalles que le dan ese toque tan encantador que tienen los pueblos.
Todo, absolutamente todo en Morella es tremendamente fotografiable.
En mi defensa diré que parte de que Morella me causara esa impresión de calidez y encanto es porque me trae recuerdos del pueblo de mi padre que esta en Andalucía, ya que tanto las calles empedradas como las paredes encaladas no dan lugar a otra cosa, lógica tambien ya que ambos son de origen musulmán. 
Desde lejos, y como toda ciudad que posea un castillo, Morella ya tiene una silueta atrayente.

Detalle de un tejado de Morella.