El bosque mágico de Castellfollit

Érase una vez un bosque en el qué al igual que en tantos otros se podían buscar setas, con alguna salvedad, este bosque era mágico y  aquí las podías encontrar en cualquier época del año, no necesitaban la lluvia y  además no estaban en el suelo sino en los árboles, en sus troncos para ser más exactos y eran casi casi tan grandes como ellos, pero aun así no resultaba fácil verlas. Había truco, sólo podían verse de una manera, desde un punto en concreto y mirando con los ojos de un niño.
Así que haced memoria si decidís visitar este bosque porque si no puede que os marchéis sin haber visto ni una sola seta…. no doy más pistas y si podéis ir a visitarlo porque merece la pena.